Papá Noel soltero busca compradores para hacerse selfies

Supongamos que Mark Tuley guarda un recuerdo imborrable de su infancia, cuando iba de compras navideñas con su madre por la plaza de Carthage. En ese caso, tiene que ser su deleite al visitar la semejanza mecánica de dos metros y medio de Santa Claus en el escaparate de la farmacia de la esquina, Read Brothers. Girando incansablemente de un lado a otro, saludando a los compradores y emocionando a los niños, el simbólico sustituto de Papá Noel era un tema de conversación y la estrella de muchas fotografías a lo largo de los años.
Avancemos hasta 2020. Tuley Furniture and Appliance Company celebra 91 años en Main Street con Mark al frente de la empresa familiar. El edificio de Read Brothers sigue en pie al otro lado de la calle, pero la farmacia ha desaparecido junto con las tiendas de cinco y diez centavos, las jugueterías y las tiendas de productos secos, sustituidas por nuevas boutiques familiares y despachos profesionales.
La histórica plaza de Cartago, con sus fachadas recién pintadas y sus farolas de estilo vintage, está cuidadosamente conservada. Parece un pintoresco pueblo navideño a la espera de compradores, turistas y las primeras nevadas.
Para los más jóvenes que deseen hacerse una foto navideña para colgarla en las redes sociales -algunas cosas no han cambiado-, ahí está Papá Noel, como antaño, saludando a sus fans y esperando a que alguien se haga un selfie.
Sí, la decoración navideña de la plaza cerró el círculo hace tres décadas, gracias a la precisa sincronización de Mark Tuley y a su talento creativo para el trueque. "A principios de los 90, la joyería Wilburn de Lafayette ponía en su escaparate cada Navidad un Papá Noel mecánico, exactamente igual al que yo recordaba de la droguería", explica Mark. "Cuando la joyería quebró, descubrí que estaban vendiendo el Papá Noel. Le cambié al dueño dos mesas grandes por él. Su mujer quería mucho el mueble, así que fue un buen negocio para todos".
Un buen negocio, sin duda, para todos aquellos a los que nos gusta rememorar una época en la que hacernos una foto con Papá Noel -incluso con uno motorizado- era lo mejor del año. El mero hecho de tener a Papá Noel en la tienda para saludarle cada mañana hace que Mark se contagie del espíritu navideño. Espera que los clientes que traían a sus hijos a Tuley's para ver a Papá Noel traigan ahora a sus nietos. "Me alegro de que Tuley's pueda formar parte de traer buenos recuerdos que ahora pueden compartirse con otra generación".









